miércoles, 17 de abril de 2013

NO QUEJARSE  
VIDA DE LA PALABRA 
Sola una, (para dejar espacio a las vuestras), de mis EXPERIENCIAS viviendo la Palabra del mes ("hermanos, no os quejéis los unos de los otros"):

1.-           Las Palabras de vida de marzo y abril me están haciendo abrir los ojos. Llevo 3 ó 4 años que, casi sin darme me cuenta, me quejo a menudo, lo cual supone una crítica indirecta a los que están cerca de mí: "¡otra vez en el frigo varios paquetes abiertos de lo mismo… y luego se estropean!", "¡de nuevo sucia la sandwichera, yo que llevo tanta prisa cuando voy a desayunar…!", "la luz del servicio varias horas encendida…", etc. También los demás tienen que "aguantar" mis descuidos, olvidos y manías. Muchos días he "triunfado" (callo, limpio, coloco, apago…; en silencio trato de excusar y comprender), pero otros tantos (¡o más!) tropiezo (lo expreso en voz alta).
            El otro día fui a recoger con el coche a un compañero; como no estaba donde habíamos quedado, se pasaba el tiempo (que yo lo tenía muy escaso); interiormente trataba de excusar: sí, al final, en esa estación había un sitio similar y yo estaba en uno y él en otro.
            Como llegamos luego a mi compromiso más que justos (yo habría querido estar media hora antes), se ofreció a tomar el vehículo, llevarme directamente y luego él ya volver a casa y descargar maletas… La verdad es… en fin…, pensé que no debo estar apegado, (de los 2 que tenemos en casa, es el coche menos viejo [8 años, el otro tiene unos 25]), y que debo confiar siempre en el hermano. Por la noche, le dije que si había sacado del coche mi ordenador, como le encargué; entonces me comentó temblando que había rozado el coche al guardarlo en el garaje; traté de no inmutarme: "qué se le va a hacer". Y bajé tranquilamente a sacar el ordenador con el propósito de no mirar desperfectos. Pero cuando yo salía, se acercó él: "¿lo has visto?". Ya que bajó, entonces sí lo miré: (aparte del marco de la puerta de la cochera) todo el lateral derecho del automóvil (desde debajo del faro delantero hasta el final de la puerta trasera, con varios roces fuertes; incluso delante, hasta cortada la chapa). Traté de disimular el disgusto (pensando nuestro corto presupuesto y lo mucho que iba a suponer el arreglo, pues eso seguramente no lo cubriría el "seguro con franquicia"), pero tratando de ponerme en su lugar: "¡tranquilo!" (la verdad es que intenté decirlo de todo corazón, aunque me temo que no lo dije muy fuerte). Al tratar de dormir, pensé lo que diría yo al del seguro al día siguiente: me venía la tentación de disimular los hechos; decidí contar cómo fue, aunque estaba seguro de que no me iba a creer (como así sucedió al día siguiente, pero yo contento de exponer la realidad): dijo que eran cosas distintas, cortes y roces a varias alturas… y que habría que dar varios "partes" y pagar la franquicia por cada uno. Al final sólo di el de delante que era el más "escandaloso"; y ya está arreglado y pagado.
            En fin, empiezo de nuevo cada día y retomo con ilusión a mitad de mes el intento de "no quejarme".

Alguna de vuestras EXPERIENCIAS viviendo la Palabra del mes ("no os quejéis los unos de los otros") y las de marzo ("el que libre esté de pecado, le tire la primera piedra") y meses anteriores. ¡Gracias a tantos por compartirlas!:
1.-           “...¡¡FELIZ PASCUA, CRISTO VIVE!! Nuestra alegría y nuestro mayor gozo es saber que está entre nosotros.                                             
         ¡¡GRACIAS A TODOS!! por vuestras oraciones y por hacernos llegar vuestra unidad. 
         En Navidad noté que tenía un bulto y cuando empezamos la Cuaresma había que hacer todas las pruebas. Vivir este tiempo de gracia y conversión era confiar plenamente en el AMOR de DIOS.
         Esperar resultados a veces no es fácil, pero cuando, cada día, recibes a JESÚS EUCARISTÍA y te sientes sostenida por la oración de los HERMANOS es sorprendente la paz que podemos llegar a experimentar viviendo con serenidad cada día su voluntad.                                            Aunque me estaba preparando interiormente para lo peor, los resultados han sido
buenos y no hay nada maligno. Ahora sólo debo ser observada. 
         Con todo esto también nos llegaba el nacimiento de nuestro primer nieto y justo el día del padre: fue S. JOSÉ quien "lo trajo en sus brazos" para celebrarlo.
         Para nosotros ha sido hermoso sentir también, ante el gozo de la vida, vuestro amor concreto que comparte penas y alegrías.
         Es la PASCUA y por eso, hoy, quería compartir con todos la alegría de haber podido ver al SEÑOR…

2.-     “Feliz Pascua del Señor. "No tengáis miedo de las sorpresas de Dios"; "arriesga por Dios, porque nunca quedarás decepcionado". Estas dos frases las dijo nuestro Papa Francisco en la Vigilia Pascual (a los que seguimos por televisión). Me parecen tan ricas de contenido, que os las envío como Felicitación.
         "El que esté sin pecado, que tire la primera piedra" es la palabra de vida de este mes.
         Tengo un asunto por el cual he llegado al juzgado: ya he tenido que declarar dos veces, y he tratado de no vengarme, de buscar la verdad y lo justo, y dejar aparte el mal pasado, procurando no hacerle daño en lo que más le dolería, tratando de respetar la palabra dada. Y confío que Dios lo resolverá, a pesar de las estrategias y mentiras del contrario. Es como me parece vivir la palabra de este mes.
         Feliz Pascua para los cuatro. Alegraos, porque cuánto bien hacéis a la gente. Yo estoy entre ellos…

3.-     “me alegra especialmente la palabra de este mes, Paco, pues creo que es algo que yo tengo que pulir de mí misma: no me he de quejar tanto de los demás, pues antes de exigir a los demás tengo que rendir cuentas yo. Estoy segura que esta Semana Santa la has vivido intensamente y con mucha felicidad; yo GRACIAS A DIOS también: han sido unos días fabulosos, como si de un regalo de Dios se hubiese tratado, aunque sé que no me los merezco; por eso quiero llevar a cabo la Palabra del Mes de Abril a rajatabla...

4.-       “Feliz Pascua de Resurrección. Cada vez que leo tu email de la palabra de vida y las experiencias, me emociono. Veo y leo cómo hay tantos hermanos/as que llevan a Dios tan adentro y con tanta humildad que siento envidia azul, envidia sana.
     Me hace renacer y a la vez me siento pequeñita, porque me doy cuenta que tengo que amar más, AMAR en el sentido completo de la palabra, Amar a Dios y a mis hermanos y no perder el rumbo, tratar de no perder el rumbo, en el camino hacia el SEÑOR.
     Recordando ahora que las mayores dificultades para vivir nuestra fe no provienen de afuera, sino, las que provienen de dentro, de las situaciones que se producen y los comportamientos de nuestros hermanos cristianos y que debemos por tanto, tener calma y paciencia y mucha misericordia, me doy cuenta una vez más que me cuesta mucho, me resulta tan difícil llevarlo a cabo, pero ese es el camino que debo tomar. No quejaros los unos de los otros.
     Este lema me viene perfecto. Debo ponerlo en práctica siempre. Gracias Paco, porque siempre das en la diana o mejor dicho, es Dios el que siempre da en la diana

5.-       “tengo que reconocer, que algo ha sucedido esta Semana Santa. No es para "tirar cohetes", pero me he encontrado más amable, más comunicativo con personas que no lo era tanto y, en resumen, he estado más alegre. No hay razón aparente para ello salvo "Él".
         Luego, y sin más explicación, vuelven las caídas y te invitan a pensar que no eres nada, o mucho menos que nada, y llegas a la conclusión de que siendo consciente de tu inmensa debilidad, comprendes de dónde te viene tu fuerza para realizar lo poco bueno que consigues hacer. 
         Como otro años hemos estado en los Oficios en una iglesia de mediano tamaño y, por lo tanto, muy acogedora. Han sido tardes muy bonitas…

6.-       [desde Rusia] ¡Gracias para esta PdV! Ayer ya recibí la presentación que me mandaste en ruso, sin embargo, es también precioso leerla en español y practicar una vez más. Y las experiencias de tus amigos: me doy cuenta que es posible comportarse como un cristiano en la vida cotidiana, empezando con las cosas pequeñas. Trato de seguir el ejemplo de ellos, ¡gracias por la inspiración!
         ¡Quería felicitarte la Santa Pascua que tuvieron ayer! ¡Te deseo que siempre guardes en tu alma esta alegría clara, esta proximidad a Dios y fraternidad a los próximos, la pureza y bendición que sienten todos los cristianos este día! ¡Cristo ha
resucitado!
         En cuanto se refiere a nosotros, tienes razón: tendremos la Pascua el 5 de mayo. 
         También quería darte mis felicidades otro ocasión de mayor importancia: la elección del Papa Francisco, por supuesto. Vi la ceremonia de su nominación y, aunque no soy católica, me conmueve la solemnidad y la alegría que compartían los creyentes en la plaza. ¡Puedo imaginar qué sentías tú! A mí, me gusta el Papa nuevo: parece un hombre de gran bondad y humildad

7.-       “El mes pasado cuando leí la palabra de vida, no se me quedó nada más que el título; pensé: "algo me quiere decir; me dedicaré a las pequeñas cosas". «El que esté sin pecado que tire la primera piedra».            Había una colilla en mi coche y la tiré al suelo; arranqué el coche y, de repente, me acordé de una experiencia que había leído; me bajé del coche, la cogí, la envolví y la dejé para tirarla luego a la papelera.
            Me iba a Misa; llovía mucho y vi a un niño solo que andaba buscando algo; aparqué, fui donde él y le dije: "¿buscas el seminario?"; me dijo que "sí" y se le iluminó la cara. "Por donde viene esa chica, está allí, si está cerrado, (a esta hora, no creo), da un poquito vuelta y está la del patio abierta". Se puso contento y me dio las gracias y se fue. Luego me arrepentí por no haberle acompañado: recé por él.
            Si alguna vez iba a juzgar a alguien, me he acordado de la palabra de vida; no siempre lo consigo. Pero cuando vives, te sientes libre.

8.-     “…tengo dos amigos con los que hablo muy a menudo por teléfono. Toda una semana, uno de ellos no llamó. El primer impulso fue: "no me llames más". Ayer, en cambio, pensé en llamar yo: tuvimos una larga conversación agradable, sin reproche. Y al final yo estaba lleno de alegría por este pequeño paso con amor

9.-     “…en el trabajo hubo que cambiar en nuestra oficina algunos ordenadores antiguos o menos potentes. Uno de mis colegas quería específicamente uno más potente. Siento que tengo la libertad de recibir o no recibir otro equipo, estoy listo y le cedo el mío. Finalmente, le dejé mi equipo antiguo, pero el colega recibido un ordenador mejor; sin embargo, se rompió al día siguiente, así que le ofrecí trabajar en mi equipo

1 comentario:

  1. La Palabra de vida de abril me ha ayudado a darme cuenta de que "me quejo" a menudo (¡y yo creía que no lo hacía nunca!): ha sido un permanente examen de conciencia que espero me haya ayudado a crecer como persona.

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