domingo, 20 de enero de 2013

¡QUE TODOS SEAN UNO!

¡QUE TODOS SEAN UNO!
Un texto de Juan Pablo II para seguir ilustrando esta semana de oración por la unidad de los cristianos:
"Ut unum sint! La llamada a la unidad de los cristianos, que el Concilio Ecuménico Vaticano II ha renovado con tan vehemente anhelo, resuena con fuerza cada vez mayor en el corazón de los creyentes…
         Cuando afirmo que para mí, Obispo de Roma, la obra ecuménica es «una de las prioridades pastorales» de mi pontificado, pienso en el grave obstáculo que la división constituye para el anuncio del Evangelio. Una Comunidad cristiana que cree en Cristo y desea, con el ardor del Evangelio, la salvación de la humanidad, de ningún modo puede cerrarse a la llamada del Espíritu que orienta a todos los cristianos hacia la unidad plena y visible. Se trata de uno de los imperativos de la caridad que debe acogerse sin compromisos.
         El ecumenismo no es sólo una cuestión interna de las Comunidades cristianas. Refleja el amor que Dios da en Jesucristo a toda la humanidad, y obstaculizar este amor es una ofensa a El y a su designio de congregar a todos en Cristo. El Papa Pablo VI escribía al Patriarca ecuménico Atenágoras I:«Pueda el Espíritu Santo guiarnos por el camino de la reconciliación, para que la unidad de nuestras Iglesias llegue a ser un signo siempre más luminoso de esperanza y de consuelo para toda la humanidad»."
JUAN PABLO II, Encíclica "Ut unum sint" sobre el empeño ecuménico, nn. 1 y 99



1 comentario:

  1. Gracias, Paco.
    En esa misma encíclica Juan Pablo II decía que no se es verdaderamente cristiano si no se tiene ese fuerte anherlo por la unidad.

    ResponderEliminar